MÉXICO QUERIDO
“POBRES O POBRECITOS”
GABRIELA RIVERA BUENO
El 47.7% de la población en México está sumida en la pobreza, es decir, no cuentan con ingresos suficientes para satisfacer sus necesidades de salud, educación, alimentación, vivienda, vestido y transporte público.
La población desempleada en México es de 2.3 millones, esto quiere decir que no cuentan con un ingreso fijo.
Te has fijado que en las ciudades grandes como lo son D.F, Guadalajara y Monterrey y también en una que otra ciudad de la República Mexicana, en cada semáforo de las avenidas concurridas hay una muestra del desempleo en México, desde el traga fuegos, los payasitos, el señor que se avienta a un tapete con vidrios, las personas que venden objetos como flores hasta cargadores para celulares, y lo peor aún, las personas que por sus “ganas” de trabajar piden dinero porque se dicen ser ciegos, cojos o simplemente porque ocupan alimentar a sus más de tres hijos que tuvieron sabiendo que no tenían como alimentarlos.
Yo creo que tres de cada diez personas les da limosna a las personas en un semáforo, para irnos a lo bajito sacan tres pesos por semáforo, la gente les da dinero a estas personas por simplemente lástima, parece que estos mendigos estudiaron mercadotecnia con especialidad en persuasión porque saben el guión perfecto, más la actuación estelar para saber mover los sentimientos de las personas y así soltar unos pesitos para los “pobrecitos”; para seguir en lo bajito, hay que suponer que saquen $100 por día, esto es más que el salario mínimo que gana un cajero o mesero, al cual le piden la secundaria o preparatoria para poder entrar a trabajar, las personas que piden dinero en la calle no necesitan educación y no tener educación aunque está sea gratuita implica gastos como uniformes, materiales escolares y cosas más.
Pero lo que nos pasa por la mente es “pobrecitos” por no tener educación, por no tener un abrigo en época de frío, por tener puestos callejeros los cuales no hacen sus declaraciones en hacienda y esto quiere decir que no pagan sus impuestos, por asolearse día con día en los semáforos, por vender objetos baratos, y por ser pobres.
¿Se nace o uno se hace pobre? Puede sonar descorazonado, sin sentimientos, cruel y hasta grosero, pero una mujer que ayuda al que hacer en una casa, le pagan por muy poquito $200 y tiene un trabajo de cuatro a seis horas, no ocupo educación, y puede mantener a un hogar si saben administrar bien su dinero, y se nos hacen “pobrecitos” las personas que simplemente alzan la mano.
México no sale del hoyo, porque nos gusta estar en el hoyo, el hoyo es cómodo, y el hoyo es la banda que nos ciega y no nos deja ver lo que hay afuera, la gente es pobre porque así lo quiere, no quiero generalizar porque también hay falta de empleos en México, y muchos son estudiantes a nivel licenciatura o menos, pero yo hablo de esos pobres que simplemente se quedan en la calle pidiendo dinero, esas personas están en el hoyo porque así lo quieren, y esas personas poco a poco vacían nuestro bolsillo, aunque eso no es lo importante.
Lo importante es darnos cuenta ¿por qué a la gente le gusta estar en la miseria?
Ellos mismos se crean la idea de que son “Pobrecitos” y que así seguirán toda la vida, que por haber nacido en condiciones poco estables, hablando de la economía, así seguirán por siempre, que no vale la pena tener una vida mejor.
Lo importante es darnos cuenta ¿Por qué a los “pobrecitos les gusta ser pobres”?